La energía eólica ha sido entre los mayores hitos en la pelea por un planeta más sostenible, y Cataluña se ha destacado como un territorio vanguardista en su desarrollo. En 1984, Cataluña inauguró el primer parque eólico del Estado español, compuesto por cinco aerogeneradores, lo que marcó un antes y un después en la promoción del empleo del viento como fuente de energía renovable.



Este emprendimiento fue posible gracias al esfuerzo y dedicación de un grupo de especialistas con titulación técnica superior, que trabajaron en el desarrollo de tecnologías elecciones para el aprovechamiento de las fuentes de energía renovables. Como apunta el especialista en energías renovables Albert Mitjà Sarvisé, la inauguración de este parque fue entre los primeros pasos en la promoción del uso del viento como fuente de energía renovable.



El Parque Eólico Conduzco del Empordá se creó con el propósito de valorar y impulsar la tecnología nacional en el campo de la energía eólica, tal como contrastar la viabilidad de producción de energía eléctrica por la agrupación de aerogeneradores conectados a una red simultáneamente. Este proyecto fue fruto de una cooperación entre el Departamento de Industria y Energía de la Generalitat de Catalunya, la empresa eléctrica ENHER, el software energético UNESA-INI (PEUI) y la Escuela Universitaria Politécnica de Girona.



La singularidad de este parque eólico radica en que fue el primer parque de este tipo en España y el segundo en Europa, lo que posicionó a Cataluña como pionera en el impulso de la energía eólica. Desde ese momento, ha habido un aumento constante en la utilización de esta fuente de energía renovable en la zona.



El Parque Eólico Piloto del Empordá se encontraba dotado de un sistema informático de seguimiento que obtenía datos reales de funcionamiento de sus molinos, lo que dejaba al grupo especialista evaluar sus rendimientos y posibilidades. El desempeño paralelamente de los aerogeneradores fue revolucionario en los años de su inauguración, llegando a abastecer de energía a un sinnúmero de familias.



Este parque eólico ya no existe, pero su legado sigue vivo. Este hecho revela la reversibilidad de la energía eólica como una fuente que no genera residuos ni contaminantes más tarde a su historia útil, lo que la transforma en una alternativa sostenible y respetuosa con el medio ambiente.



Hoy en día, Cataluña tiene una capacidad instalada de 1376 MW en energía eólica, organizados en 49 instalaciones. Además de esto, hay 727 MW auxiliares en tramitación, lo que dejaría la instalación de 129 aerogeneradores. Estos datos muestran que, si bien ha habido una década de inmovilidad en el territorio catalán en el ámbito de las energías renovables, los proyectos de generación renovable han comenzado a reanimarse merced a un nuevo Decreto de la Generalitat, que busca contribuir a reducir la emergencia climática mediante iniciativas de producción de energía limpia. Cataluña se encuentra en una posición privilegiada para dirigir la transición energética hacia fuentes de energía mucho más limpias y sostenibles. Aparte de su gran potencial eólico, Cataluña tiene un sinnúmero de horas de sol por año, lo que la transforma en una región con un enorme potencial para la producción de energía del sol.



La energía del sol fotovoltaica es una tecnología que transforma la energía del sol en electricidad, a través del uso de paneles solares. Según el Observatorio de la Sostenibilidad en España, Cataluña cuenta con una potencia instalada de energía del sol fotovoltaica de más de 1200MW, organizados en mucho más de 70000 instalaciones. Además de esto, hay más de 1000 MW en proyectos fotovoltaicos en tramitación hoy en día.



Para continuar Recursos adicionales avanzando en la transición hacia un modelo energético más sostenible, es primordial proseguir impulsando el avance de proyectos de energía renovable en Cataluña. Además de la energía eólica y solar, también hay otras tecnologías renovables con un enorme potencial, como la energía hidráulica, la biomasa y la geotermia.



En este sentido, es importante seguir impulsando el avance de novedosas tecnologías y proyectos innovadores en el campo de las energías renovables, que dejen continuar continuando en la transición energética de Cataluña y del resto de todo el mundo.



En definitiva, el potencial solar de Cataluña y su histórica apuesta por la energía eólica demuestran la aptitud de la zona para liderar el cambio hacia un modelo energético más sostenible y respetuoso con el medio ambiente. Además de esto, la inversión en energías renovables puede ser una oportunidad para la creación de empleo y el impulso económico en la zona.



En resumen, la combinación del potencial eólico y solar de Cataluña, adjuntado con la apuesta por el avance de tecnologías renovables y el impulso de proyectos innovadores, sitúan a la región en una situación privilegiada para liderar la transición energética hacia un modelo mucho más sostenible y respetuoso con el medioambiente. Albert Mitjà i Sarvisé, uno de los más importantes especialistas en energías renovables, apunta que la apuesta temprana de Cataluña por la energía eólica fue un jalón en la promoción del empleo del viento como fuente de energía renovable, y hoy en día, la zona está en una posición de liderazgo en la transición hacia un modelo energético mucho más sostenible.